La otredad y su influencia en la construcción de la escuela para todos


Dra. Sonia Isabel Salas Arévalo MSc.

Instituto Superior Tecnológico Espíritu Santo. Autor para correspondencia: sonyasalas@gmail.com> Dra. Silvia Narcisa Salas Arévalo MSc.

Instituto Superior Tecnológico Espíritu Santo Autor para correspondencia: narcisasalas@hotmail.com> Ing. Rubí Alexandra Salas Arévalo MSc.

Instituto Superior Tecnológico Espíritu Santo

Autor para correspondencia: ra.salas@tes.edu.ec


Fecha de recepción: 25 de diciembre 2017 / Fecha de aceptación: 25 de enero de 2018


Resumen:

El pensamiento dominante en la educación actual, está fundamentado en la idealización de la escuela para todos, sin desestimar la libertad individual frente a las luchas sociales, para “ejercer el derecho al estudio, al reconocimiento de la diversidad étnica y cultural” y a la valoración de su historia y la de sus antepasados para no revivir el colonialismo que involucionó a las culturas de muchos pueblos sometidos para el enriquecimiento de unos pocos. El estudio tuvo como objetivo principal destacar la influencia de la otredad en la construcción de la Escuela para todos, así como, reconocer y valorar que la “definición del Otro” es parte de lo que se reconoce en uno mismo y evidencia sus características culturales; es por ello que se tomó como estrategia metodológica el análisis e interpretación de algunas reflexiones de pedagogos y escritores que aportan al desarrollo del tema, tales como Elizabeth Sosa, Octavio Paz, Paulo Freire (1999) y Brunner (1996).


El resultado del análisis recalca la importancia del término “otredad” en la convivencia humana para comprender por qué algunos grupos excluyen al o los Otros, la respuesta está en las diferencias, las mismas que el docente debe conocer para ser el primero en valorar, respetar e inspirar lo mismo en y para todos los participantes de su clase.


La conclusión destaca que la alteridad u otredad pueden identificarse en las relaciones humanas, en la cultura, la raza, la orientación sexual, las ideologías, etc., sin embargo, ninguna diferenciación humana llámese xenofobia, racismo u otra, se cumple totalmente, ya que “nosotros y los otros” formamos parte del universo; he allí la importancia de saber coexistir y promover el crecimiento de cada individuo, empleando la dialogicidad como una de las herramientas humanas más efectivas para interactuar desde la otredad.


Palabras claves: Escuela para todos, otredad, alteridad, dialogicidad


26

Esta obra se comparte bajo la licencia Creative Common Atribución-No Comercial 4.0 International (CC BY-NC 4.0)

Revista Trimestral del Instituto Superior Tecnológico Espíritu Santo


Abstract


The dominant thought in current education is based on the idealization of the school for all, without rejecting individual freedom in the face of social struggles, to "exercise the right to study, to the recognition of ethnic and cultural diversity" and to the evaluation of its history and that of its ancestors so as not to revive the colonialism that involuted the cultures of many subjugated peoples for the enrichment of a few. The main objective of the study is to highlight the influence of otherness in the construction of the School for all, as well as to recognize and value that the "definition of the Other" is part of what is recognized in oneself and evidences its cultural characteristics; that is why the analysis and interpretation of some reflections of pedagogues and writers that contribute to the development of the subject, such as Elizabeth Sosa, Octavio Paz, Paulo Freire (1999) and Brunner (1996), is taken as a methodological strategy.


The result of the analysis emphasizes the importance of the term "otherness" in human coexistence to understand why some groups exclude the Other, the answer lies in the differences, the same that the teacher must know to be the first to value, respect and inspire the same in and for all participants in your class.


The conclusion emphasizes that alterity or otherness can be identified in human relationships, in culture, race, sexual orientation, ideologies, etc., however, no human differentiation, be it xenophobia, racism or other, is fully met, since that "we and the others" are part of the universe; There is the importance of knowing how to coexist and promote the growth of each individual, using dialogicity as one of the most effective human tools to interact from otherness.


Keywords: School for all, otherness, alterity, dialogicity


Introducción


Ante el deseo de América de proclamar su descolonización, surge la respuesta dominante de Europa en llamarla tercer mundo, ¿es que acaso existen varios mundos dentro del globo terráqueo? ¿Qué es lo que hace que América sea desagregada o colocada fuera del mundo en

el que habita Europa? En el presente estudio se han considerado los postulados de La Escuela

para todos, desde el concepto de la inclusión; la UNESCO acoge esta iniciativa de Educación para Todos (EPT) como un compromiso mundial para dar educación básica de calidad, en el Foro Mundial sobre la Educación (Dakar, 2000); se tratará acerca de la importancia de la atención a la diversidad desde la otredad, aspecto epistemológico que ha sido considerado en la actualidad como el nuevo camino de la Pedagogía para “aprender juntos y con el otro” constituyéndose en un valioso aporte para el proceso del inter aprendizaje.

El estudio de la Ecología de saberes pone en evidencia un claro ejemplo de discriminación contrario al significado de la otredad, se da entre los saberes del norte y la falta de reconocimiento de los saberes del sur, aparece entonces la ecología de saberes como la igualdad de oportunidades para reconocer el saber local, propio, cultural, autóctono, sin embargo, en muchos países, las ausencias generan brechas entre los saberes del sur llamados ancestrales que nacen de la empiria y los saberes del norte que al nacer de la investigación científica, desean disminuir el valor y utilidad de los saberes del sur.

Otro elemento clave en la construcción de la Escuela para todos desde la otredad es la biofilia, término que invita a trabajar con vínculos con las personas, implica trabajar con la idea del amparo, de protección, de comunidad, del amor a la vida y de respeto a todo cuanto vive; es por ello que la pedagogía que considera a la otredad como una actitud para educar y aprender con dialogicidad, cree que la escuela es un lugar de respeto y de crecimiento para todos sus actores.

“Acerca de las bases antropológicas de la educación y sobre sus condicionantes históricos. La concepción antropológica que fundamenta la pedagogía de Freire se refiere a un hombre cuya

característica distintiva es la conciencia de sí mismo y del mundo, conciencia que le permite establecer relaciones con la realidad. Esta relación se caracteriza, en el pensamiento de Freire, por ser activa, porque vincula al hombre con el espacio y el tiempo y porque el hombre puede captarlos y transformarlos de forma reflexiva y crítica.” (Carreño 2010, p.9)

El pensamiento pedagógico de Paulo Freire, insigne pedagogo brasileño, enfatiza la importancia de la consciencia que debe desarrollar el hombre, de sí mismo y del mundo, puesto que le sirve de puente para relacionarse de manera ágil con el contexto para absorberlo y convertirlo a su favor y al de la colectividad, de manera consciente y crítica.

Es posible que esa práctica política educativa requiera de un pacto social, así lo planteó el Ministerio de Educación en España, allá por el año 2010, puesto que cada individuo hace política desde cualquier espacio donde se encuentre y el aula de clase debe acercarse al proceso de ese pacto social que promueve el respeto a la diversidad; para este efecto se debe construir las bases metodológicas del diálogo que faciliten la integración del individuo desde las diferentes realidades que afectan al educador , a la comunidad y al aprendiz, y de esa manera asegurar la educación inclusiva, el reconocimiento de la diversidad, la interculturalidad, .y procurar los medios y recursos adecuados para que todos los centros educativos puedan garantizar la plena incorporación, en condiciones de igualdad de oportunidades, de los estudiantes con necesidades específicas de apoyo educativo.


Al analizar la función social de la educación con igualdad de oportunidades, es imprescindible citar a Comenio.

Comenio promovió la escuela para todos y suscitaba el traslado de los estudiantes del campo a la escuela (colegio internacional), evidenciando así, que el maestro debe ser el ente que lleve a los aprendices a pensar una escuela junto a otros y con otros, un lugar de respeto e interacción humana en el que el aprendizaje muestre a la sociedad en su diversidad etnográfica, cultural, social, etc., un lugar donde se construya una educación como un acto político, societario y diverso, gracias a la vinculación entre el maestro y sus aprendices sin discriminaciones ni actitudes tóxicas, demostrando así, que la escuela construye al nuevo hombre nuevo. Comenio definió la educación como el arte de hacer germinar las semillas interiores que se desarrollan no por incubación sino cuando se estimulan con oportunas experiencias, suficientemente variadas y ricas y sentidas siempre como nuevas, incluso por quién la enseña. El método pedagógico se basa en los procesos naturales del aprendizaje: la inducción, la observación, los sentidos y la razón; así como el eliminar totalmente la violencia del proceso educativo y trabajar por una educación comprensiva, reflexiva no memorística, y un proceso para toda la vida, que integre las actividades creativas humanas y sus principios para una amplia reforma social basada en la unión de la teoría, la práctica y la crisis (estímulo para el pensamiento).


Desarrollo


El presente estudio toma como referentes de reflexión los aportes de Elizabeth Sosa en su artículo titulado La otredad: una visión del pensamiento latinoamericano contemporáneo, se mencionan los pensamientos del escritor Octavio Paz y de Brunner (1996) para destacar la

influencia de la otredad en la construcción de la Escuela para todos.

La pedagogía que presenta Paulo Freire es integradora, reemplaza el “Nadie” por el “Todos”, habla de salvación como resultado de una educación liberadora en comunidad; integra además la ideología de la biofilia a través del cultivo del ser, trabajando con el mundo y no en el mundo, lo cual se alcanza con una escuela para todos, sin mecanicismos, donde se comprenda y analice el contenido de las ciencias y se lo contextualice para dar sentido y utilidad a lo aprendido; para ello es imprescindible redescubrir el término “otredad” para alcanzar el reconocimiento del “Otro” como un individuo diferente, que aún sin formar parte de la comunidad propia, tiene mucho que enseñar y aprender; así tanto el educador como el aprendiz, dan paso a la bidireccionalidad, a la alteridad, al estudio y al trabajo rico en experiencias que contribuya a la educación integral de ambos; por tanto la otredad permite que los individuos se comuniquen, se conozcan, interactúen, se liberen, se integren y que sus ideas alcancen trascendencia, como diría Paulo Freire en su obra Teoría de la acción dialógica (2013) ”Los hombres no se hacen en el silencio, sino en la palabra, en el trabajo, en la acción, en la reflexión”.

Alteridad y otredad son palabras cuyos significados van de la mano, y en la construcción de la escuela para todos permite al docente y a la comunidad reconocer al Otro como un ser diferente a ellos, y a la vez reconocer al Otro como lo que no son ellos.

La otredad se manifiesta a través de cimentaciones psicológicas y sociales, este término revela la existencia en el mundo de algo o de alguien que no es propio de ese conjunto universo, que no forma parte del mundo, es decir, es el reconocimiento del Otro como un

individuo diferente, que no forma parte de la comunidad; estas aseveraciones resultan

convergentes a lo expuesto por el pedagogo Brunner que incluye la idea de “heterogeneidad cultural.

Para Brunner (1996):


la heterogeneidad cultural no significa, culturas diversas (subculturas) de etnias, clases, grupos o regiones o superposición de culturas, significa, participación segmentada y diferencial en un mercado internacional de mensajes que penetran por todos lados y de manera inesperada el entramado local de la cultura, llevando a una verdadera implosión de sentidos consumidos /producidos/ reproducidos. (En Sosa 1996, p 126)


La otredad, postura epistemológica que promueve una educación integral.


Otra mirada de la otredad la hace Sosa cuando dice “...es una postura epistemológica que establece un saber geo-cultural, histórico, arqueológico, sociológico y etnológico sobre el otro,… “, menciona el caso de “la América profunda” de Kusch, con el propósito de evidenciar “la cultura del estar”, y en ella apreciar los valores culturales, tradiciones, axiologías y otras cualidades que dan sentido y coherencia a la vida de una comunidad y a los individuos que pertenecen a ella y a los que llegan de otras culturas para estudiar el posible abrazo cultural que promueve una educación integral desde la otredad.

En su análisis Elizabeth Sosa menciona al escritor Octavio Paz, (1914-1998) premio Nobel de Literatura, quien explica la otredad como una actitud humana que genera un alteración de admiración en el hombre frente a la presencia de sus semejantes, advierte que es la toma de conciencia de su individualidad, donde el individuo se auto- reconoce como parte de la sociedad, asume que hay otro individuo con una realidad y gustos opuestos a los suyos.

Itinerario de Octavio Paz. (1993)


La Escuela para todos frente a la carencia y búsqueda


El mismo Octavio Paz narra en sus escritos Itinerario (1993), un acontecimiento autobiográfico en el que reconocía su soledad desde niño y su llanto le fuera indiferente a los otros pero no así mismo, "Él es el único que oye su llanto, a partir de ese momento, asegura Paz que el individuo se separa del mundo y se dice "ya lo sabes, eres carencia y búsqueda", es decir que toma consciencia del Yo y los otros: nosotros y los otros. La otredad es, pues, un problema que concierne al hombre aislado y a la colectividad”. En la escuela para todos, el docente escucha ese llanto, como en el caso de Ecuador que cobija a los desplazados colombianos que huyen de la barbarie de las guerrillas y el narcotráfico, o a los venezolanos que salen de su país debido al hambre e inequidades que viven en su tierra o personas que por la movilidad humana ahora habitan en suelo ecuatoriano e ingresan al sistema educativo con una fuerte carga de carencias y búsqueda no sólo de conocimientos, sino de aceptación de lo que son y de sus diferencias, ahora tienen hambre de oportunidades y no de rechazos; en casos como estos el docente debe ser el mediador para educar en la diversidad con la palabra y el

ejemplo. No hay en Ecuador, un desplazado al que se le haya negado la oportunidad de educarse en el sector público.


Importante aporte tiene Fernando Ulloa para el tema de la construcción de la Escuela para todos y se refiere a la empatía como una condición que deriva de la ternura, que garantiza (calidez, comprensión, atenciones), trabajar en medio de afectos e interesado en el sujeto ajeno y distinto de uno mismo; aspectos que le darán seguridad en su desarrollo para que adquiera autonomía. (Ulloa F., pp.135-136)

La otredad y las ideas emancipadoras en la práctica educativa


El filósofo Alain Badiou hace reflexiones teóricas acerca del rol de la política y la ética en relación a la educación en contextos de opresión como el caso de la película Sophie Scholl, en el cual una joven alemana decide hacer resistencia al régimen nazi conformando un grupo anti-violencia conocido como la «Rosa Blanca». El análisis del film deja al descubierto el peso que tiene la educación al ser responsable de enseñar el reconocimiento del “Otro en la sociedad”; y ser el escenario propicio sembrar en las consciencias de los individuos ideas emancipadoras metafísicas, capaces no sólo de superar el temor a la muerte por la defensa de sus convicciones y de la defensa de su propia humanidad; como diría Paulo Freire: “…no hay práctica educativa que no sea política; no hay práctica educativa que no involucre valores, proyectos, utopías. No hay, entonces, práctica educativa sin ética”. (Freire P. pp50-51)

Tras lo expuesto es de anotar que la educación contemporánea no puede ser exiliada de temas políticos, sociales, históricos, etc., la noción de otredad no sólo es frecuente en ciencias como la filosofía, la sociología, la antropología y otras, está presente en las normativas que rigen los sistemas educativos, en la selección de los contenidos del currículo, en los paratextos con que se ilustran los textos escolares; en las distribuciones de las masas escolares a diferentes tipos de instituciones educativas donde se evidencia que la repartición de cupos no fue justa y existen niños menores de siete año viajando solos en transportes públicos para llegar a sus escuelas porque se reconocen las diferencias del “Otro” para crear brechas en las relaciones y oportunidades entre los Otros y los propios, porque no se trata del reconocimiento del Otro como un individuo diferente, que no forma parte de la comunidad propia, esto no implica, que el Otro deba ser discriminado o estigmatizado; por el contrario, las diferencias que trae consigo son una riqueza social, etnológica y cultural y pueden enriquecer con nuevos saberes a la comunidad que lo acoge, a esa escuela nueva que integra con estrategia, con posicionamiento de la clase, con respeto, con la construcción de saberes contextualizados, con espacios para el diálogo, la problematización de los saberes y la propuesta de nuevos aprendizajes.

La otredad frente a la existencia de uno mismo


El filósofo francés Jean Paul Sartre (1905 – 1980), utilizó el término otredad para estudiar a fondo la existencia de uno mismo a través de lo que sería la mirada del otro; este proceso responde a diversos mecanismos psicológicos y sociales, a cambios y reformas en América y

el mundo en los que hay que ver sistemas que favorezcan la otredad con alteridad y la

dialogicidad como esencia de la educación en la práctica de la libertad entre el docente y sus estudiantes, entre estudiante y otros estudiantes, entre el docente y sus autoridades, entre la institución y su entorno; es importante dialogar con lenguaje de apertura, donde pueda leerse la sociedad y no una parte de ella; un lenguaje similar al del individuo al cual se educa, para que la interacción y los conocimientos sean significativos y no meros actos mecánicos, con este fin de que el docente fomente la búsqueda del contenido programático, fortalezca las relaciones hombres-mundo, consciencia y educación, colaboración y unión, organización y cultura, otredad y biofilia, todos ellos son acciones culturales que enseñan al individuo a descubrirse y a sentirse identificado con su rol social de liberador de la opresión que lo afecta.


Conclusiones


Referencias bibliográficas

Carreño, Miryam. (2010). Teoría y práctica de una educación liberadora: el pensamiento pedagógico de Paulo Freire. Universidad Complutense de Madrid. Recuperado de: institucional.us.es/revistas/cuestiones/20/art_10.pdf

De Souza Santos Boaventura. (2010). Descolonizar el saber, reinventar el poder. Trilces.

Montevideo.

Badiou, A. (1995). ¿Se puede pensar la política? Buenos Aires: Editorial Nueva Visión. Badiou, A. (1995). la ética, en batallas éticas. Buenos Aires: Nuev visión.

Fernando, U. (1995). Novela clínica psicoanalítica. Buenos Aires: Editorial Paidos. Paulo, F. (1999). Pedagogía del oprimido. México: siglo XXI.

Paulo, F. (2010). El grito manso. México: Siglo XXI.

Paz, O. (1993). La otredad como actitud humana. Itinerarios, 36.

Sosa, E. (1996). La otredad, una visión del pensamiento latinoamericano contemporáneo.

méxico: UPEL- IPC.